Shimabuku dirigirá en Santander, del 3 al 14 de febrero de 2025, un taller bajo el título de Escultura comestible. Organizado por la Fundación Botín, el taller explorará la relación entre arte, cocina y comida y las distintas metodologías existentes alrededor del mundo.

Para Shimabuku, cocinar puede concebirse como una experiencia expositiva específica de un lugar, en la que orden y cantidad realzan la experiencia gastronómica. Este taller explorará la creación de un recorrido culinario donde cada participante pueda desarrollar nuevos platos con ingredientes locales a partir de la investigación y del descubrimiento, con el objetivo de crear un menú conjunto.

El arte y la comida han estado profundamente entrelazados a lo largo de la historia. Las primeras pinturas rupestres eran, en esencia, representaciones de ciervos, vacas y otros animales y, desde entonces, los alimentos han sido una fuente de inspiración artística: las patatas de Van Gogh, las frutas de Cézanne, los bodegones de Picasso y Braque, y las exploraciones modernas de Lichtenstein, Oldenburg, Sigmar Polke (con patatas y salchichas), Fischli & Weiss, Wolfgang Tillmans, Jana Sterbak y muchos más.

En esta línea, las obras de Shimabuku como Caqui y tomate, Amanecer en Mt. Artsonje, El Fish & Chips de Shimabuku, El viaje del pepino y Algo que flota / algo que se hunde, nos muestran cómo el arte y la comida pueden dialogar de formas inesperadas.

El taller está vinculado a la exposición Shimabuku: Pulpo, cítrico, humano, que se presenta en el Centro Botín de Santander hasta el 9 de marzo de 2025.